“Espiar a periodistas de esa manera pertenece a un sistema cloacal”, Edith Febles.
Recientemente fueron revelados los resultados de un análisis del laboratorio sobre seguridad por Amnistía Internacional (AI) que confirma que un dispositivo móvil propiedad de la periodista Nuria Piera había sido infectado con Pegasus en tres ocasiones entre 2020 y 2021, siendo este el primer caso confirmado en el país.
Dicha investigación encontró indicios de que el celular de la destacada periodista dominicana se había infectado con Pegasus por primera vez sobre el 20 de julio de 2020. También se descubrieron indicios similares en torno al 8 de septiembre de 2021 y el 1 de octubre de 2021.
Estas revelaciones coincidieron precisamente con la conmemoración Día de la Libertad de Prensa el pasado 3 de mayo y sirve de ocasión para hacer algunas reflexiones sobre violaciones de la libertad que muchas veces somos objetos los periodistas y miembros de la prensa y para hacer un recordatorio de que es una práctica instalada en docenas de países haciéndose presente también a través de la censura, ataques, acoso, detenciones e incluso la muerte.
¿Qué es exactamente Pegasus y qué permite hacer?
Se trata de una programa o aplicación de spyware cuya función una vez instalado en los móviles se puede tener acceso a la información personal del usuario: llamadas, lista de contactos, correos electrónicos, archivos, fotografías, incluso su ubicación tipo GPS. Además, puede activar en cualquier momento, sin que la víctima se entere, el micrófono y cámara del aparato.
El uso de esta app supone un gran peligro para cualquiera, pero especialmente para aquellos que ocupan cargos de gran responsabilidad o manejan información sensible como el periodismo de investigación por ejemplo.
El diseño del software se hizo en Israel y el grupo NSO se encargó de su comercialización. Varias investigaciones han evidenciado que decenas de gobiernos han empleado Pegasus para diversos fines, entre los que destacan Estados con “democracias débiles”, regímenes totalitarios o un historial de repetidas violaciones a los DD. HH. y la libertad de prensa.
Sobre el caso Nuria Piera
La República Dominicana es el tercer país de las Américas, después de México y El Salvador, donde Amnistía Internacional ha confirmado a través de una larga investigación el uso de Pegasus tanto contra periodistas como contra defensores y defensoras de los derechos humanos.
En una entrevista ofrecida al programa “El Día” que conducen los periodistas Edith Febles, Indhira Suero y Germán Marte, Nuria dio a conocer algunos detalles de su caso que incluso ha sido reseñado por varios medios internacionales.
Reveló que las ocasiones que fue hackeada por Pegasus se encontraba realizando investigaciones al exjefe de seguridad presidencial, mayor general Adán Cáceres; principal implicado del caso Operación Coral; al exministro de Hacienda Donald Guerrero, implicado en la Operación Calamar y al actual presidente de la Cámara de Cuentas, Janel Andrés Ramírez.
También trabajaba un caso de un coronel de la Policía Nacional acusado de chantajear a parejas sentimentales de reclusos a quienes exigía favores sexuales.
Nuria también dio a conocer que en la actual gestión también había sido intervenida
“Sí me sorprendió un poco que de este Gobierno lo estuvieran haciendo también”, externó durante la entrevista cuando afirmó que la práctica de espionaje no era exclusiva de la pasada gestión que encabezó el ex presidente Danilo Medina y el Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
No obstante, en una carta remitida a la directora de Amnistía Internacional para Las Américas, Erika Guevara, la Procuraduría General de la República (PGR), garantizó que desde el gobierno dominicano no se utilizan servicios de espionaje o vigilancia “que contravengan dichos principios fundamentales”, y que en la actual gestión no se han contratado al NSO Group ni a ninguna otra empresa que opere en este ámbito o cuyas actividades atenten contra los derechos humanos y las garantías individuales. La Presidencia también se pronunció al respecto diciendo que abrirá una investigación del caso.
Ojo: El espionaje no es la única amenaza que enfrentan los periodistas éticos en la República Dominicana. Durante los últimos años hemos visto la salida abrupta e injustificada de varios periodistas y comunicadores de medios importantes, incluso esas salidas han motivado la diversificación de cómo y dónde hacen sus trabajos periodísticos recurriendo a medios alternativos.
También se vive en las redacciones con algún tipo de censura, enfrentando campañas de descrédito, uso de bots en redes sociales o con el miedo a tener cualquier conversación por teléfono, porque los celulares aquí se “pinchan” como deporte.
Hay una afirmación que hiciera la periodista Edith Febles durante esa conversación con Nuria y con la que quisiera cerrar este artículo y es la siguiente: “Espiar a periodistas de esa manera pertenece a un sistema cloacal”.
Debe quedar claro primero, que el espionaje y el acoso a la prensa no es una práctica exclusiva de una organización política en particular, sino de quienes se sienten amenazados por un trabajo periodístico ético y responsable y segundo, la manera en que vemos nuestra sociedad y cómo actuamos tiene mucho que ver con la información que manejamos, por tanto, la libertad de expresión y la libertad de prensa son derechos fundamentales. La libre difusión de las ideas es lo que impulsará sin dudas el desarrollo de nuestro país.
Lo que dice la gente